el espiritu no tiene discapacidad

Si ya llegué hasta aquí... Con la conquista del conquistado, con la piel rasgada de apuros y el dolor emancipado. Si ya llegué hasta aquí... Seguiré el camino de las estrellas y del fuego encubierto en letra, Traspasando las horas de mi tiempo con la paz de un niño dormido. Si ya llegué hasta aquí... Con mis ideas que han pagado precio y mis errores justificación. Si ya llegué hasta aquí... Sin saber que caminaba como necio... Sin saber que nada de lo que viene es ni será. Ni que vibrará vivo y puro... Que sólo será un dejarse... Un sonreír despacio al hilo punzante de lo inevitable. Que sólo será una lágrima inoportuna y el oscuro devenir... Si ya llegué hasta aquí... Con mi mirada perseverante... sobre lo que quise y no pude... Si ya llegué hasta aquí... Ahora... Dejaré fluir mis venas en los ríos del infierno. Jurando que volvería a vivir lo que viví. Si ya llegué hasta aquí... Ahora... Aceptaré lo que jamás estuvo en mi sueño. Si ya llegué hasta aquí... Ahora... ¿Cómo no preguntarse e inquirir... Cómo se hace para no morir... Si sólo tu dueño sabe cómo vivir sin ti?